Crumble de fresas

Hoy os traigo la que pasará a ser una de mis tartas preferidas. ¿Por qué? Porque cumple con todos los requisitos necesarios para serlo: Fácil, rica y resultona. ¿Se le puede pedir más? Pues sí. Además podríamos clasificarla dentro de las tartas "saludables". Lleva muy poquito azúcar y mantequilla y toda la base está hecha de fruta natural, en este caso fresas. ¿A que mola?

Ingredientes:
- 250g de fresas
- 75g de harina
- 40g de azúcar
- 40g de mantequilla
Sí, solo eso...
Los pasos a seguir son muy sencillos.
Precalentamos el horno a 180º por arriba y por abajo.
Lavamos y cortamos las fresas en trocitos. Las colocamos en un molde apto para horno.
A continuación mezclamos con las manos en un bol la harina, el azúcar y la mantequilla, que deberá estar a temperatura ambiente.
El resultado será como una migas.

 

Las repartimos por todo el molde tapando las fresas y al horno durante unos 25 minutos o hasta que se dore la parte de arriba.

¿Fácil o no? Ésta la tenéis que hacer seguro. Yo ya tengo ganas de probar otras variantes: de manzana, de cerezas... ¡seguro que queda genial!

 

Otro detallito, fría está muy buena pero aquí, que es de donde la saqué, recomiendan servirla templada. Si la hacéis, ¡mandadme una foto!