Organízate con Washi Tape

Empiezo la semana contenta porque este sábado estuve trabajando en la que va a ser "mi nueva habitación-taller".
Tengo la gran suerte de que en casa nos sobra una habitación. Por supuesto "sobrar" no es exactamente la palabra que debería utilizar, ya que si no la tuviéramos el comedor estaría lleno de trastos, abrigos, cascos, maletas,... y no sigo porque no podría parar. Quizás sería mejor decir que está... libre. Bueno, pues empiezo de nuevo.
Tengo la gran suerte de tener una habitación libre en casa! Y desde este fin de semana ha dejado de estar libre! Sí, me la he quedado yo. Y tengo mil ideas para hacer en ella. Aunque de momento he empezado por ordenarla.
Como ya os he comentado, la habitación sirve para todo y para nada. No sé si es por esta razón pero tiene la gran habilidad de desordenarse muy muy muy rápido. Así que tuve que meterle mano durante todo el día.
Esta hecha con muebles que hemos ido heredando de amigos y familiares, incluso alguno que hemos encontrado por la calle. La semana pasada adoptamos un escritorio nuevo que ha sido la escusa perfecta para ponerse manos a la obra y, como no, para bautizar por fin a la habitación: Mi nueva habitación-taller.
Así que empecé por clasificar todo el material craft por temas y a colocarlo en los diferentes cajones del nuevo escritorio. Ahora tengo cuatro cajones con scrapbooking, patchwork, herramientas y otros. Si, al cuarto he decidido ponerle el nombre de "otros", más cordialmente conocido como el lugar donde va a parar todo aquello que no sabes donde poner pero que algún día esperas utilizar para algo.
A lo que iba, organizando organizando, me acordé que la semana pasada me llegaron los washi tape nuevos. Os hablé de estos celos japoneses cuando hice el curso para decorar mesas. Podéis verlo aquí.
Y pensé, ya que me organizo, por qué no hacerlo con estilo. Mirar que pasó.

Cogí unos cuantos potes de vidrio y decidí forrar las tapas. Ordeno y decoro! Ahora estos potes quedan genial en mi escritorio de trabajo y es una manera fácil de tenerlo todo a mano. El añadirle etiquetas, en este caso con la Dymo, me ayuda a ver rápidamente que hay en cada pote.

Y ya que estaba, pensé en hacer lo mismo con los potes de la cocina. Estos de aquí ya los tenía decorados. Un regalito de mi hermana.

Mi consejo: Apodérate de un espacio para ti en casa y personaliza-Lo. Y de paso, utiliza el material que tengas para decórarlo. Las lanas, por ejemplo, no hay porque tenerlas guardadas. Puedes encontrar fácilmente una cesta de frutería o de mimbre donde poder dejarlas y que, a la vez, le den color a tu habitación. O hacértela tu misma, como ésta. Aquí tenéis el tutorial para hacerla.



Feliz Lunes.